Despegue y Historias de Muerte

Cuando despegamos de Christchurch cerre los ojos. Pense en que este si que era el primer paso para algo importante. Los viajes en avion son siempre significativos. El caminar por las mangas, es como un entrar en un tunel de posibilidades. Como una entrada, un pasillo, un portal. Despues el despegue. Esa velocidad que te presiona la cabeza pero te mantiene inmovil, que te dice que ahora todo empieza y cuando despegas las cosas que dejaste atras ya no existen. Con el primer momento en que las ruedas salen del piso y el avion se levanta todo comienza de nuevo. Primero el cuerpo sube y despues baja completamente violentando a la ley de gravedad aplastando la cabeza con todo el peso del cielo.
En la pelicula Piso Compartido, el personaje de Xavier habla de que su historia c'est une histoire de decolage. Puede que siempre los viajes signifiquen eso, cambian la vida en muchos aspectos y siempre comienzan con el despegue.
Salir de Christchurch fue sobre todo dejar el sur. El trabajo y la gente con la que estuvimos. No nos pudimos despedir de casi nadie y yo apenas de Jeremy. No lo alcanse a ver y nunca nos pudimos contactar y le deje una carta y un regalo. Pero ni una ultima mirada a los ojos, ni un beso nada. Me siento mala. Me fui asi no mas, rompiendo corazones por mi falta de apego. Pero bueno. No creo que nos veamos en mucho tiempo mas y el tampoco hizo el esfuerzo descomunal por encontrarme. Yo fui al pueblo como habiamos acordado y si el hubiera sido un poco atinado, lo cual nunca fue, habria cachado que la ultima noche nos encontrariamos en los pubs si nos perdiamos el rastro. Pero bueno asi es la vida.
Nos despedimos de los queridos alemanes en la increible ciudad de Christchurch. Nos llevo un chinito llamado Alex en su auto porque el volvia a la universidad alla. Su auto era pequeno y estaba lleno con todo su equipaje de vuleta para vivir en la ciudad. LLegue con el poto acalambrado porque la maleta de Fran ocupaga todo el espacio de mis piernas que se acomodaban como podian en un rincon al lado de la puerta. Bella ciudad Christchurch. Una mini Europa, cosmopolita, culta, bohemia. Especial para un tipo como Ferdinand. Hace como 2 o 3 semanas atras habiamos venido por un fin de semana a verlos y a conoser la ciudad, ademas para despedir a Gonzalo que en ese momento estaba dispuesto a irse solo a vivir con ellos y trabajar en el sur para emprender una travesia solo separandose de la familia que habiamos formado. Aunque ya estabamos disgregados desde que habiamos llegado a Blenheim ese fue el punto culmine de nuestro equipo. Los 5 quedamos en 3. Los 3 de Tailandia. En esa oportunidad Gonzalo nos compro a Bertha. 200 dolares para cada uno. Nos fuimos todos en road trip al sur y carreteamos una noche en la ciudad mas bohemia de NZ. Los Alemanes nos llevaron a un parque donde bebidos vino, comimos chocolate y yo barsamente fume de los esquisitos Lucky Strike de Ferdinand. Despues en la calle de los pubs segui el ritmo de Francisca y pasamos por todos los pubs que pudimos, haciendo una sobredosis nocturna de gente, ropa, estilos, musica, luces y parafernalia. La pasamos bien. Terminamos a las 5 y algo de la manana pensando en que a esa hora nos levantabamos en los dias normales y que el carrete no duraba tanto desde ano nuevo. Volvimos a dormir en el auto y en la manana nos hecharon del estacionamiento donde estabamos ilegalmente durmiendo, asi que nos fiumos a disfrutar de la ciudad que peatonamente nos recibia con musica en las calles, flores y un ambiente dominguero de feria de primer mundo.
Eso fue Crhistchurch esa vez. Ahora, hace 2 dias cuando llegamos los alemanes nos recibieron mucho mas calidamente que la vez anterior cuando eramos demasiados para que ellos pudieran ser hospitalarios. Nos invitaron a su nuevo hogar. Una casa preciosa al mas estilo sur de Chile de madera y que techo preventor de la constante lluvia invernal, amarilla con verde, llena de flores en el patio de entrada: sector fumadores como en muchas casas, donde habian ceniceros revalsando en la mesa. Ahi nos recibieron con unas cervezas y nos pusimos al dia de muchas cosas. Yo conte mas historias porque la Fran solo podia reir ante lo que entendia en Ingles acerca de toda la gente que habiamos dejado atras y los alemanes contaban su rutina en su nueva querida ciudad.
La historia mas tragica es la de Gonzalo. Despues de que nos compro el auto y nos hizo el favor a todos de no quedarnos mas tiempo con el cacho de a quien se lo podemos vender con tantas pifias. En verdad ya no era Bertha, estaba en toda su faceta Karen Paola. Bien chana, flyte, arisca y manosa. No encendia hasta como el 7mo intento o mas. Yo lo maneje mucho cuando recien empezamos a ir a Talley's. Las mujeres nos aporderabamos de las responsabilidades laborales. Mientras Daniela, Fran y yo nos sacabamos la mierda en esa puta fabrica para llevar el dinero a la casa, los hombres se quedaban en la casa flojeando pero nnca hacian el aseo. La cosa es que mientras yo ocupe el auto a mi me encendia bacan. Yo creo que tanto cambio de conductor y de trato al mismo auto afecto la sencibilidad de chatarrita de dueno unico. El parabrisas eternamenete trizado, el ruido de gargante quebrada que salia del motor y la luz de aceite siempre prendida tampoco ayudaban mucho a que fuera unac venta segura. Gonzalo la compro porque le encantaba. El carino de Bertha por ser nuestro hogar le hizo a Gonzalo gastar cerca de 1000 dolares en reparaciones para que pudiera andar legal con el WOF al dia (revision tecnica). Se fue al sur con Carolina y Paulina, sus companeras de agronomia que fueron nuestras partners por como 2 semanas en Blenheim. A una hora de viaje, Bertha sufre secuelas de la operacion y muere de un ataque por siempre. 400 dolares la grua. Mecanicos muy mala onda que no devuelven nada y dan las mortales opciones de: o pagar por ver como se puede salvar algo (inutil) o venderla como chatarra por 100 dolares. La segunda opcion no afecto a Gonzalo y se fueron igual a recorrer el sur los 3 chilenos en el bolido femenino. En Habersting o al go asi. El segundo auto muere y debe ser vendido como chatarra por 100 dolares. Completamente tristes, las intrepidas personas expertas en la naturaleza campestre viajan a pie hasta hoy. Hoy martes vuelven a Blenheim para empezar de nuevo trabajar y ahorrar. Porque les queda el resto del ano de este martirio. De esta vida sacrificada que elijieron para evitar la realidad de Chile. Evitar la madures obligada, la cesantia criolla y el hogareno cordon umbilical de 24 anos. Aperrando como nadie. A empezar de nuevo cada dia de paga en las vinas, cada planta como cada rebanada de pan que se hechan a la boca.
Con Fran ya estamos en Auckland. Ayer un maori muy simpatico y atento, como casi todos los que hemos conosido, nos llevo en su van a la ciudad y nos ahorro el dinero que gastamos para dormir en el ACB, el mitico backpacker donde todo comenzo. Nada parecia como antes para mi. Todo sordido y de mala espina. Un ambiente no muy agradable y definitivamente algo que no hubiera elejido para trabajar, al final igual me gusto el campo y las ciudades chicas. Conosi a la gente. A la verdadera gente, a la invisible de este pais y el verdadero trabajo, el que se hace con las manos y nada mas. Salimos a carretear, un vino conversadisimo en una plaza y bailar en los clubs de los backpakers. Terminamos chateando con Chile ebrias a las 4 de la manana en un internet de 24 horas. Chistoso ver a dos chinitos roncando al frente de un computador al lado nuestro.

Ahora espero que este dia termine para manana tomar el verdadero despegue. El verdadero viaje. Deseenme suerte que el mundo va a ser al reves como dijo la DD. Y quizas yo me vuelva al reves tambien.
Muy largo y muy fome. Pero filo. Internet barato. Un beso, Chau