sábado, 10 de marzo de 2007

Perdida En Bangkok

Esta ciudad es cuatica.
Llegue aca de un pais que aparenta maxima perfeccion a una ciudad de maximo caos. al aterrisar un bus nos acerco a la calle donde quedaba nuestro hotel. 4 noches incluidas en el pasaje de avion. En la noche temprana pero tarde para nuetro horario Neozelandes, un taxi muy peculiar nos paro y ofrecio llevarnos a nuestro hotel por una suma de 200 bat (moneda tailandesa: U$1 = 34 bat). El tuk tuk es una motoneta multicolor que atras tiene espacio para llevar a 3 personas en un asiento acolchado tambien multicolor, con un techo de metal bajo y adornos asiaticos varios. Cachando que el weon obviamente nos iba a cagar, regateamos hasta 150. El paseo fue el inicio y el perfecto indicio de lo que iba a ser esta ciudad. A una velocidad vertiginosa el tuk tuk daba vueltas por las calles atestadas de autos, motos y taxis fuccias y amarillos fosforecentes. Las luces pasaban por ambos lados pegadas a mis brasos desprotegidos de la interperie porque estos carritos no tienen puertas. Este hace su propia ley de transito pasandose la cola interminable del taco metiendose contra el transito mientras los autros vienen de vuelta. El nombre que tiene es por el incansable sonido de su motor que ruje como lo haria un vehiculo canario, fuerte pero nazal y medio agudo. El humo esta por doquier. El smog me recuerda los peores dias de Santiago con la diferencia que aqui el aire es denso, humedo. El ambiente es hediondo, aunque ya me acostumbre, los miles de carritos de comida liberan un calor que aumenta la brigida sensacion termica del clima de este pais, tienen un holor a podrido y casi toda la comida es rancia como el peor saguche de potito de la calle. Cuando recien llegamos salimos a carretear apenas nos instalamos en Clasic Place Hotel. Una calle que vimos prendida fue nuestro destino. La noche no aplaca el calor, y la calle de hecho aumenta tambien la candela humana. Era un barrio rojo. Una calle de esas que escuchas acerca de los mitos de esta ciudad. Lleno de viejos verdes gringos y europeos llevandose a las prostitutas. Ninas tai, que seguramente no eran tan jovenes como nosotros creimos porque aqui todos se ven mas jovenes de lo que son. El cutis les favorece son el clima. La imagen era sordida. Chocante, sodomica y gomorrica. Las mujeres buscando el sexo con miradas y acercamientos provocativos. Con poca ropa para un oriental pero no tan poca para un occidental. Entramos a los pubs del comercio sexual tailandes como experiencia de lo que la decadencia del mundo ha hecho de esta parte de la ciudad. Despues supe que los gringos entraron por Tailandia durante la guerra de Vietnam y literalmente dejaron la casa de putas en esta ciudad. Los pubs tenian muchas ninas bailando en tarimas, mesas y techos de vidrio. Todas semi desnudas, ninguna mostradolo todo pero igual revelando una cochinisima intension sexual, ninguna bailaba en verdad, yo creo que esperaban dinero para cualquier movimiento. En esta ciudad todo signifca plata. Y el Turista es un dolar con pies. El ambiente era rancio pal pico. Incomodo y Sucio para nosotros. No era que me hubiera acuicado en NZ, pero sentia que me estaba contagiando de todas las enfermedades infecciosas a traves del aire. Me sentia asquerosa. Me acababa de banar en el hotel y ya estaba empapada de sudor mio,y del del ambiente. Mezclado con el vapor de aceite y brigido olor a podrido de los carritos, el piso leproso. Viendo a los ratones y a las cucarachas pasar en algunas oportunidades. No fue la mejor bienvenida a Bangkok. Volvimos al hotel espirituados. En el camino nos encontramos con un elefante llevado por un domador como si fuera un perro suelto amaestrado. Loquisimo. Esta ciudad no necesita de drogas para volverte loco ientras caminas por ella. Es aterradoramente loca e imparable. No hay ningun lugar de descanso ante el ruido, los autos, el eterno trafico dia y noche, el olor, el calor, la gente que repleta las calles y las ferias callejeras con sus pasillos enanos que parecen haber sido construidas deliberadamente estrechas para que halla harto ruido y harto apretujamiento. A pesar de todo esto nadie roba. No se si es porque tienen algo asi como una prhibicion media karmatica religiosa o porque en verdad son tan aprovechadores que no lo necesitan. No pierden una oportunidad para cagarte. Los taxistas, los tuk tuk, el weon que te cobra la plata en la micro. No te devuelven el vuelto haciendose los weones. Los que atienden en cualquier tienda te dicen un precio ante cualquier producto el doble de lo normal. Nada dice que preci tiene todo es una retorica constante una batalla de avispamiento entre el tai y el millonario turista. Ellos ganan casi siempre con nosotros. Pense que tenia la sangre de mi padre ante el regateo pero hoy me senti hasta angustiada , ante el convencimiento y la manipulacion incansable. Pero igual pensaba que filo que me cagaran un poco porque para nosotros su moneda es bien barata. Pero es casi una batalla por nuestro orgullo ahora. Violentas casi ya estamos medias hostiles cuando se trata de pagar. Todo es dinero para ellos y nosotros somos una carnada facil. Los chilenos no son nada de pillos aca, nada. El pillo chileno es un pollo, de 5 centimetros el pollo.
Hay buenas personas como Mariwan, una senora que nos ayudo sin que se lo pidieramos y que nos dijo que el tuk tuk de 150 nos habia cagado, obvio, principiantes. Y como Jennifer que le pidio el vuelto de la micro al aweonao que cobraba el pasaje. Igual siempre sonrien, te sonrien de vuelta, muy antichilenamente. Alegra el momento del dia ante tanto estres.
Me canse de todo esto en verdad. La Fran se canso desde que llego y Jorge fue el segundo en caer. Yo me resisti ante la idea de que no me gustara esta ciudad. Recorde cuando recien llegue a Santiago de Osorno con mi sindrome Carmela y me encantaban la locura del trafico de la ciudad, los paseos por la Alameda para mi eran un agrado. Por mucho rato trate de rescatar la belleza de lo exotico de esta locura callejera bangkokera pero colapse. Ante nuestro rechazo, nuestro refugio letargado es la pieza del hotel. Los otro turistas, los otros viajeros, patiperros y nomades gypsis que esperabamos encontrar en esta ciudad, como esa tribu viajera internacinal que forma una misticidad terrenal en todos los lugares estaba muy lejos de nuestro hotel. Nos perdimos de ir a muchos templos y lugares bacanes que tiene esta ciudad porque entre que nos perdiamos, porque ningun tai sabe orientarse en un mapa y solo 1/6 si no menos de la poblacion habla ingles, entre que nos demorabamos porque el tuk tuk nos cagaba de alguna manera o algo asi, entre que nos dabamos mil vueltas antes de salir del hotel, entre que discutiamos por los lugares a donde ir, etc etc. Me perdi de ver al Sleeping Buda. Manana me voy a Cambodia y ya no lo vi hasta la vuelta. Pero bueno, asi es la vida y el tiempo. Este caos en sierto sentido igual es exotico y unico pero cansa y estresa mucho. Anoro un hom en Angkor Wat. No se como los budhistas de esta ciudad pueden meditas loco.
Salimos a carretear ayer viernes. A RCA, Royal City Avenue. Una avenida con hartos pubs, todos estilosos y con los mejores djs que he escuchado en mi vida. Unos punchis con bajos monstruosos y musica diversa muy buena. Sono Shakira en uno de los ambientes y movi un poco las caderas. Todos apretujados en todas parts, ambientes aparecian como pasadisos en un castillo medienval, todos cn aire acondicionado pero sin ninguna salida eviente en caso de terremoto. Mucha gente con estilo. Todas las Tai con sus pintas estrafalarias y chik, ningunga con apariencia ruda, desalinada, fofa como nosotras. Pero filo. Exoticas nosotras aca. Joge se nos perdio en el carrete y volvio solo, se perdio igual en la calle y paso el resto del dia solo. No hay mucho problema porque a pesar de que hay rincones muy oscuros que parecen brigidos no hay nada de aparente delincuencia hacia los turis. La hay pero al parecer casi nada. Yo igual me perdi un dia, osea no llegue al punto de encuentro a tiempo porque los tramites tai son de imprdesibles horas y la ciudad no espera a nadie. No es muy entrete para mi estar sola en esta ciudad, necesito apoyo mental para regatear y para ser tan diferente perdida en Tokio, bah! en Bangkok.

Los chicos me esperan al final de la calle sentados en un pub para tomarnos unas cervezas en un barrio de extranjeros con puros ojos no rasgados, para despedirnos de esta ciudad, tratar de relajarnos y hacer Chile entre nosotros, descubrirnos por esta brigida oposicion que nos pone espejos psicodelicos, esquizofrenicos y distorcionados ante nosotros con olor a Tai. Un olor aspero, amargo y asitico. El olor del agua y del aire. Que nos cambia los sentidos y nos cambia por dentro.

Donde estoy??

Saludos. Manu.


Padres mios. Me puse las vacunas de Typhoidea y Hepatitis A y B y compre las tabletas contra la Malaria (Jorge tambien tia). Estoy entera pica por los mosquitos y la insalubridad no la resistirian mucho. Antes sentia que me contagiaba con el aire pero ahora estoy toda acostumbrada y con temple de viajera. No he probado los bichos fritos y no me da hambre durante el dia por el calor. Estoy sana y salva y me cuido. Nos cuidamos. Tranquilidad y carinos. Besos. Chau.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Buena Manu, la cagó que estai conociendo culturas totalmente distintas a las nuestras. Además con tanto calor y hediondez vai a volver más flaca e inmune a los olores.
Te echamos de menos. Acuérdate de sacar hartas fotos.
Cuídate mucho y saludos a mi hmno.
la Vale.